La pastoral del colegio coordinó este momento especial y querido por la comunidad marista. Así es como nuestro capellán y jefe del departamento de Religión, Padre Humberto Henríquez, guió los distintos momentos que se vivieron en la mañana dedicada al Señor. Este año tuvimos la fortuna de contar con nuestro obispo, Mons. Cristián Contreras, quién reflexionó sobre el sentido que tiene la Semana Santa para la comunidad católica. En lo medular, Monseñor Contreras destacó la importancia y validez en la sociedad actual de las enseñanzas de nuestro Señor y cómo debemos ver en él un ejemplo de coherencia, entrega, amor y servicio hacia los demás. Posteriormente, se invitó a los presentes a un momento de oración y conversación con el Señor. En dicho momento y a la luz de ciertas preguntas dirigidas a cada uno de los asistentes, el objetivo fue intentar sentir y reflexionar sobre la presencia del dolor en nuestras vidas y cómo ver en nuestro Señor un modelo a seguir en dichas circunstancias. Asimismo, las personas que quisieran confesarse podían hacerlo en salas habilitadas especialmente para tan importante sacramento. En el tercer momento el Padre Humberto nos transmitió un mensaje de alegría y esperanza. Todos estamos llenos de problemas y tratamos de vivir adelantados, su mensaje fue a vivir intensamente el día a día según el ejemplo del Señor y a no sufrir innecesariamente por lo que no es importante. El último momento de la jornada fue de oración comunitaria. Antes de retirarnos, recibimos la bendición sacerdotal y agradecimos la posibilidad de reunirnos para vivir tan hermosa experiencia como familia marista.